Por qué las mujeres son mejores inversoras que los hombres

Los números no mienten. Una y otra vez nos muestran que las mujeres invierten mejor que los hombres.

Pero ¿por qué el sexo influye en el éxito en las inversiones? Es algo innato en la mujer. Su propia naturaleza hace que, cuando se decide a invertir, lo haga mejor que el hombre consiguiendo rentabilidades superiores y corriendo menos riesgos.

Así lo recoge Borja Durán, co-fundador de Finletic, en su libro ‘Gestión del Patrimonio Familiar’. “Las mujeres invierten mejor que los hombres sobre todo por factores asociados al comportamiento humano (behavioral finance). Estos factores acaban traduciéndose en carteras mejor estructuradas gracias a que cuentan con más asesoramiento debido a su prudencia, menor exposición a modas del mercado y reducida rotación (timing) y, consecuentemente, menos costes e impuestos.”

¿Cuáles son estos factores?

• Prudencia

Harris Poll realizó una encuesta para Charles Schwab en la que se dibujaba un rasgo de la personalidad de las mujeres que es clave para el buen inversor: la prudencia.

El 48% de las mujeres contestaron que son muy prudentes a la hora de decidir sobre sus inversiones, el doble que los hombres. Y solo el 52% siente que lo está haciendo bien, frente al 82% de los hombres que no tiene dudas, según otro estudio de Charles Schwab.

• Tranquilidad

La mujer tiende a ser tranquila y eso se nota en sus carteras, que son más estables que las de los hombres. Solo hay que mirar el gráfico de arriba para ver que los hombres hacen, de media, un 45% más de operaciones que las mujeres y eso les hace perder un 1,4% de rentabilidad anual por costes en impuestos y comisiones por todos esos cambios.

La mujer también suele invertir de la mano de un asesor que tiene un estilo y personalidad similar al de ella, siempre mucho menos agresivo y activo que el que busca el hombre.

• Racionalidad

Niessen y Ruenzi ya hablaban de las diferencias hombre-mujer en su estudio 'Gender Matters: Gender and Mutual Funds’: las mujeres son menos agresivas en sus operaciones y se involucran menos emocionalmente. Usan más la cabeza y no se dejan llevar por el corazón.

Una cartera de inversiones de una mujer está balanceada entre la renta fija y la variable y solo hace rotaciones cuando es necesario. Invierte en valores con múltiplos bajos y mayores rentabilidades por dividendo y se fija más en los factores cualitativos que en los puramente financieros (asumimos que las mujeres tienen, por defecto, un sesgo value y a dividendos).

• Modestia

En el estudio de Charles Schwab (1991-1997), mencionado en el gráfico superior, también se reveló que los hombres solían exagerar sus aciertos inversores. Al hombre le gusta contar a sus amigos lo bien que ha hecho las cosas, necesidad que no tiene la mujer.

Cómo son las mujeres que invierten en España

La mujer inversora en España tiene de 26 a 40 años y vive en una ciudad mediana (de 20.000 a 100.000 habitantes). No destina mucho dinero a estas operaciones (5.000 euros) y lo hace a medio plazo (de 1 a 3 años), con una orientación conservadora. De hecho la mayoría de los inversores que tienen un perfil de riesgo moderado son mujeres, según publica Expansión, haciendo referencia al V Barómetro del Ahorro del Observatorio Inverco.

Lo más habitual es que la mujer inversora escoja un plan de pensiones como primera opción (57%). Aunque también hay una proporción importante (48%) que se inclina por los depósitos. Es mucho más raro verla escoger fondos de inversión como herramienta favorita para invertir (24%).

Cuando recurre a un fondo de inversión, suele contratar 2,8 productos para diversificar estrategia. No destina más del 26% de su patrimonio a este tipo de inversión y la duración media es de 4,9 años.

Fiel al carácter tranquilo y cerebral del que hablábamos más arriba, la mujer inversora mira sus posiciones una vez al trimestre. Mucho menos que el hombre, que lo hace todos los meses.

La educación de los hijos (40%) es la principal preocupación económica de esta mujer inversora, según los resultados de una encuesta realizada por la Asociación Española de Asesores y Planificadores Financieros (EFPA España) entre 1.314 asesores certificados. Le siguen la independencia financiera personal (21%), la compra de una vivienda (20%) y el ahorro para la jubilación (12%).

La mujer se acerca cada día más al mundo de las inversiones para hacer crecer su dinero. Los asesores que contestaron a esta encuesta indicaron que, en el 58% de los casos, es la mujer la que asume las decisiones financieras en el seno familiar, diez puntos más que hace dos años. Solo el 13% delega estos asuntos.

Cuando la mujer no quiere saber nada de las finanzas es porque tiene un claro desinterés por la materia (39%), no atesora cultura financiera (28%) o considera que es un mundo de hombres (18%).

Qué aprendemos de las mujeres inversoras

Tras analizar la forma de invertir de las mujeres y ver cómo consiguen mejores resultados que los hombres, ¿qué podemos aprender de ellas? Borja Durán, que ha estudiado su comportamiento, hace estas sugerencias:

• Invertir a largo plazo con un plan que recoja cuáles son tus objetivos y restricciones.
• Recurrir a un asesor profesional que te ayude a diseñar tu cartera de inversiones.
• Evitar tomar decisiones impulsivas sin análisis previo y no creerse muy listo.
• No experimentar.
• No rotar la cartera excesivamente.
• No examinar con frecuencia la cartera.